Ñuñoa, noviembre de 2007
Estimadas vecinas y vecinos,
La Red Ciudadana Por Ñuñoa alerta a la comunidad ñuñoina a no dejarse influenciar por la engañosa campaña mediática del alcalde Sabat.
Tras la reciente aprobación del Plan Regulador, el edil de Ñuñoa busca desligarse de toda responsabilidad respecto a la grave crisis urbana y social que sufre la comuna desde hace más de 4 años.
Hoy, con el nuevo Plan Regulador se perpetúan y agudizan las mismas dinámicas destructoras del anterior, proponiendo restricciones de altura a menos del 18% del territorio de la comuna, correspondiente a la actual zona Z3, ya totalmente saturada de construcciones a gran altura, y manteniendo las mismas condiciones en la actual zona Z4, la que se reduce a cerca del 40% de Ñuñoa.
Ambas zonas residenciales, que según la maquinaria publicitaria de Sabat, abarcaría el 70% a baja altura, corresponde en realidad a un 58% del territorio comunal, cuyas alturas máximas de edificación, de 5 y 7 pisos, podrán ser vulneradas por los beneficios que otorgan las ordenanzas centrales, con torres de mayor altura.
El 42% restante corresponde a los límites de Ñuñoa y a las calles principales, quedando en su mayoría, en altura libre. En suma, ningún rincón de Ñuñoa queda exento de ser devastado por el mezquino negocio privado de la construcción, que en nada contribuye a mejorar la calidad de vida de los ñuñoinos.
De esta forma, no es difícil entender la demagógica maniobra con que este alcalde pretende limpiar su imagen política en pos de perpetuarse en el poder del municipio, una vez más.
La comunidad ñuñoína sabe del esfuerzo que la Red Ciudadana Por Ñuñoa ha puesto en hacer valer los escasos derechos que otorga la ley a la participación ciudadana, así como en la fiscalización del proceso de aprobación del actual PRC. Ello nos faculta a denunciar las graves trasgresiones a la ley en que ha incurrido, tanto el alcalde como la mayoría del Concejo Municipal durante dicho proceso, soslayando, entre otras irregularidades, las más de 640 observaciones realizadas por los vecinos a la propuesta del PRC.
Por todas estas razones, y con la certeza de que el único camino posible para detener la viciada forma con que las autoridades locales pretenden imponer su voluntad, es ejerciendo soberanía, la Red Ciudadana Por Ñuñoa apela, más urgentemente que nunca a los ñuñoinos, a reaccionar frente a estos sistemáticos abusos de poder por parte del municipio, impidiendo de esta forma, que se pisoteen impunemente nuestros derechos a elegir la comuna que queremos.
Es por ello, y en nombre de los más de 7.300 ñuñoinos, que con sus firmas han apoyado la convocatoria a plebiscito comunal, en coordinación con importantes organizaciones locales, reiteramos hoy nuestro llamado a la comunidad ñuñoina a sumarse a esta cruzada, redoblando así la tarea de reunir las 12.000 firmas que nos permitirán dirimir democráticamente el futuro de Ñuñoa.
Estimadas vecinas y vecinos,
La Red Ciudadana Por Ñuñoa alerta a la comunidad ñuñoina a no dejarse influenciar por la engañosa campaña mediática del alcalde Sabat.
Tras la reciente aprobación del Plan Regulador, el edil de Ñuñoa busca desligarse de toda responsabilidad respecto a la grave crisis urbana y social que sufre la comuna desde hace más de 4 años.
Hoy, con el nuevo Plan Regulador se perpetúan y agudizan las mismas dinámicas destructoras del anterior, proponiendo restricciones de altura a menos del 18% del territorio de la comuna, correspondiente a la actual zona Z3, ya totalmente saturada de construcciones a gran altura, y manteniendo las mismas condiciones en la actual zona Z4, la que se reduce a cerca del 40% de Ñuñoa.
Ambas zonas residenciales, que según la maquinaria publicitaria de Sabat, abarcaría el 70% a baja altura, corresponde en realidad a un 58% del territorio comunal, cuyas alturas máximas de edificación, de 5 y 7 pisos, podrán ser vulneradas por los beneficios que otorgan las ordenanzas centrales, con torres de mayor altura.
El 42% restante corresponde a los límites de Ñuñoa y a las calles principales, quedando en su mayoría, en altura libre. En suma, ningún rincón de Ñuñoa queda exento de ser devastado por el mezquino negocio privado de la construcción, que en nada contribuye a mejorar la calidad de vida de los ñuñoinos.
De esta forma, no es difícil entender la demagógica maniobra con que este alcalde pretende limpiar su imagen política en pos de perpetuarse en el poder del municipio, una vez más.
La comunidad ñuñoína sabe del esfuerzo que la Red Ciudadana Por Ñuñoa ha puesto en hacer valer los escasos derechos que otorga la ley a la participación ciudadana, así como en la fiscalización del proceso de aprobación del actual PRC. Ello nos faculta a denunciar las graves trasgresiones a la ley en que ha incurrido, tanto el alcalde como la mayoría del Concejo Municipal durante dicho proceso, soslayando, entre otras irregularidades, las más de 640 observaciones realizadas por los vecinos a la propuesta del PRC.
Por todas estas razones, y con la certeza de que el único camino posible para detener la viciada forma con que las autoridades locales pretenden imponer su voluntad, es ejerciendo soberanía, la Red Ciudadana Por Ñuñoa apela, más urgentemente que nunca a los ñuñoinos, a reaccionar frente a estos sistemáticos abusos de poder por parte del municipio, impidiendo de esta forma, que se pisoteen impunemente nuestros derechos a elegir la comuna que queremos.
Es por ello, y en nombre de los más de 7.300 ñuñoinos, que con sus firmas han apoyado la convocatoria a plebiscito comunal, en coordinación con importantes organizaciones locales, reiteramos hoy nuestro llamado a la comunidad ñuñoina a sumarse a esta cruzada, redoblando así la tarea de reunir las 12.000 firmas que nos permitirán dirimir democráticamente el futuro de Ñuñoa.
¡Todos a moverse por el plebiscito comunal!
RED CIUDADANA POR ÑUÑOA
www.redciudadanapornunoa.cl
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