CARTA A LINEA DIRECTA A EL MERCURIO
25 de Julio 2006
Hace pocos meses seis vecinos vendieron sus propiedades y en esos terrenos la Constructora Inverpaz construirá un edificio de varios pisos. Se trata de la esquina de Augusto Villanueva y Avenida Irarrázaval y mi casa de dos pisos queda justo al lado de la nueva obra.
Fui a la Municipalidad de Ñuñoa y me enteré de que el arquitecto de la dirección de obras ya dio el visto bueno. Se tiene considerado hacer el ingreso a los estacionamientos exactamente por mi lado y se hará una excavación en mi línea de edificación, sin dejar ningún centímetro entre las paredes de mi dormitorio y ese ir y venir de autos que ingresarán a futuro.
Le hice saber al arquitecto de este maltrato y atentado a la privacidad y me respondió que "son casas antiguas que a veces tienen trizaduras con telas de arañas y que después la gente viene a reclamar que por motivo de la construcción se han deteriorado". Le ofrecí que los inspectores municipales visitaran mi vivienda para comprobar su estado y me dijo que eso se hacía después de que el proyecto estuviera aprobado.
¿Por qué no pueden diseñar algo que no dañe tanto al vecino, que ya ha sido bastante perjudicado? ¿A los arquitectos que son tan creativos no se les ocurre otra vía para que ingresen los vehículos?He podido observar cómo quedan después las casas abandonadas. Con las facilidades que se les dan a las constructoras para que hagan lo que quieran también deberían exigirles un plan de seguridad para los vecinos que nos quedamos a merced de cuanto delincuente merodea por las calles a la espera de una oportunidad.
María de los Ángeles Mardones, Vecina de Ñuñoa
